Sublime, perfección, belleza, cómpratelo, no lo dudes, no hay un equipo de música más completo en esta galaxia. Suena bien, muy bien, hay que ser conscientes del tipo de equipo del que estamos hablando, una única caja de 640 mm que además de altavoces dispone de unidad de proceso, puertos de comunicaciones y una fuente de alimentación integrada en el equipo, que evita tener cachivaches colgando del cable de corriente. Es un detalle que hay que valorar y aplaudir en estos tiempos del usar y tirar, Bowers & Wilkins nos propone un equipo de funcionamiento impecable y terminación exquisita.

El sonido que proyecta este Zeppelin Air es limpio, sin saturación alguna, está diseñado para rellenar de calidad sonora una estancia de un hogar.

La electrónica que alberga en su interior está a la altura del exterior. Se te puede cruzar un cable, que sin tocar el Zeppelin Air desde un terminal iPhone o un Mac, puedes hacerlo despertar de su letargo y hacer que suene para tus orejas esa canción que se te ha metido en el cerebro. Parece magia, pero no, es técnica bien ejecutada.

Electrónica en forma de arte.

Por fuera su forma elíptica, un puerto de 30 pines y en la parte trasera el conector para la alimentación, un puerto Ethernet, uno USB, una entrada auxiliar y un puerto óptico Tos Link, tres botones: uno para el encendido y dos para el volumen. Debajo del conector de 30 pines nos encontramos un diodo indicador de estado que es muy útil, rojo: apagado, verde: cargando iPhone, azul: reproduciendo contenido desde el puerto de 30 pines, morado: reproduciendo contenido desde algún dispositivo mediante AirPlay. El botón de encendido/apagado puede forzar que la reproducción se haga por AirPlay o mediante el iPhone que tengas conectado al conector de 30 pines, es una funcionabilidad muy interesante que se descubre sin leer el manual de instrucciones.

Para emparejar un iPhone con el altavoz, Bowers & Wilkins usa una pequeña aplicación que llama “Control”, es una aplicación sencilla, que funciona bien y no te complica de existencia.

Resumen de los datos técnicos más destacados:

  • Transductores: 2 tweeters de 1”, 2 medios de 3,5” y un subwoofer de 5”
  • 5 Amplificadores: 2x25W (para los tweeters) + 2x25W (para los medios) + 1x50W (para el subwoofer), rindiendo una potencia total de 150W
  • Amplificador: clase D
  • Procesamiento digital de la señal (DSP)
  • Conversor analógico-digital (DAC)
  • Rango de frecuencias: 36Hz-42kHz
  • Dimensiones: 173x640x208mm
  • Peso: 6,2 Kg
  • Consumo en reposo: 0,8W

Los datos técnicos dicen más bien poco, lo interesante es el comportamiento en la vida real y este altavoz para iPhone de Bowers & Wilkins es sencillamente sublime.